-Siento
que te odio cada vez que te miro. Que te odio con toda mi alma, con todo lo que
yo soy puedo desearte. –Sus palabras fueron
ácido clavándose en lo más hondo de mi cuerpo y mi mente. Me senté lentamente,
mientras la observaba a ella.- Pero a la vez no puedo evitar sentirme como
siempre…
Bienvenida Anika al mundo.
aaaai dios quiero leerla,
ResponderEliminarquiero a ciro
necesito de tus historia o voy a morir agonizando