sábado, 18 de febrero de 2012

Sweet dreams are made of this

Estoy sentada en un lugar verde con muchas personas a mi alrededor y mi hermana a mi lado.  Ambas saludamos a las personas que se bañan en el río que hay más abajo y a mí me cuesta un poco más porque siento que hace mucho que no sonrió.
Después vamos a bañarnos porque estamos en un campamento y me encuentro con las chicas y mi hermana desaparece.
Paseamos por la ciudad, una ciudad distinta con árboles verdes y noches pacíficas y con aroma a paz. Las casas tienen cercas de madera y podemos entrar a las que querramos porque nadie te lo prohibe. Allí me doy cuenta que tengo un pasado y a la casa que acabamos de entrar es la de alguien que no quiero volver a ver pero las chicas no me hacen caso y entran a pesar de que les imploro que no. Cuando salen yo les digo que lo que hicieron es una traición y ellas dicen que lo que les digo es mentira por lo que empiezo a llorar y me voy lejos de ellas, lejos de todo para llegar a mi casa.
Mi casa es blanca y tiene el reflejo del agua en una de las paredes porque tengo una pileta y un hermoso parque en la parte trasera. Tiene grandes ventanas que me permiten ver el interior y yo entro y me encuentro con una cantidad de personas que no quiero ver. Soy famosa, sé que a veces camino por un lugar donde todos están pendientes de mí por lo que podría ser modelo o también cantante porque me parece que me escucho cantando en algún CD que muchos compran.
Estoy rodeada de personas que son dañinas para mí y que les importa un carajo como me sienta, pero yo tengo que comportarme y simular que en realidad a mí si me importan.
Me estoy cayendo, estoy destrozada porque mis amigas me abandonaron por lo que recurro a la única persona que me quiere o le importo un poco más. Esta dentro de la casa haciendo sociales con mis invitados a los que yo debería atender. Le ruego que me abrace y que no me suelte, así que él lo hace y yo entierro mi cabeza en su pecho y voy siguiendolo a todas partes. Es agradable sentir que alguien me protege, con su mano sobre mis hombros cubriendome con su cuerpo. Se sienta en un lugar y en un momento me suelta y vuelvo a sentir que todo se cae por lo que le pido que no lo vuelva a hacer. Él me cuida y sé que se entero de mi pelea con las chicas por lo que las llama y les dice de mi depresión.



Después de eso, me despierto con una necesidad increíble de volver a encontrar esa protección que nadie parece saber que necesito. Nadie aparte de él.

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